Saltar la navegación

Siempre positivo, nunca negativo

Siempre positivo, nunca negativo

Valores como el respeto, la cooperación o la solidaridad se crean a través del contacto y de las situaciones que se viven en relación con los demás. Durante la práctica deportiva – sea a través de un juego, un entrenamiento o una competición-, aparecen emociones, conflictos, situaciones a favor y en contra…. Todas ellas nos llevan a la necesidad de aprender a gestionar nuestras actitudes y sentimientos. El deporte ayuda a canalizar toda esta mezcla de emociones de manera positiva y encauzarlas hacia un crecimiento y maduración personal. Adicionalmente, favorece que todos esos valores que habitualmente encontramos en el deporte, -como la responsabilidad, el compromiso, la solidaridad, el respeto y la inclusión y aceptación de los demás- , pasen a ser parte de nuestra personalidad.

Los valores del deporte. Fundación Rafa Nadal

 

El siguiente vídeo nos invita a reflexionar sobre todo lo anterior:

Mis conductas deportivas dicen mucho sobre los valores que yo tengo . Estos valores afectan a mi conducta tanto en actividades deportivas como en mi relación con los demás. La adquisición de estos valores en las actuaciones deportivas se trasladarán a mi forma de ser en la vida cotidiana. Esto depende de nosotros mismos y nuestra actitud.

 “Un EQUIPO no se define en el nombre sino en las RELACIONES HUMANAS, que no actúan para recibir algo de alguien sino para OFRECER algo a los demás”. 

Decálogo de buenas conductas

Ahora tenemos la oportunidad de conseguir que los deportes en los que vamos a participar gocen de la característica de ser ante todo participativos y no desmedidamente competitivos, lo cual conducirá a que todos lo pasemos bien practicando deportes de equipo.

Para lograrlo llegaremos a un consenso sobre las conductas que consideramos más relevantes y deben respetarse en el juego, y lo que es más importante, todos deberemos adquirir el compromiso de asumirlas y respetarlas en la práctica.

En esta tarea vamos a crear un decálogo de buenas conductas en un deporte de equipo. 

De cara a nuestro proyecto final: este decálogo debe formar parte del diseño de nuestro deporte. Cuando pongamos en marcha nuestro deporte, este debe ser el primer criterio: la buena conducta antes que los resultados.

Tarea
  • En grupos de trabajo cada uno de nosotros vamos a exponer las conductas no deseables durante nuestra participación en los deportes de equipo. Aquellas conductas que no nos gustan y nos sientan mal contemplarlas o sufrirlas. Realizaremos un registro de las mismas de modo que al final entre toda la clase estableceremos un decálogo de buenas conductas en el deporte. Para ello podemos utilizar la técnica de discusión llamada Philips 66.

  • Por otra parte cada grupo deberá determinar unas estrategias para reducir la competitividad y favorecer la participación de todos los integrantes del equipo en el juego deportivo, como complemento al decálogo de buenas conductas. Todo esto lo plasmaremos en una infografía común de toda la clase.  
  • Con esta información, crearemos nuestro decálogo de buenas conductas. Redactaremos los diez puntos del decálogo y los plasmaremos en: un documento de texto, una infografía o una presentación. Enviaremos este decálogo al resto de compañeros.
Portafolio

Crearemos una entrada en el portfolio, titulada "Siempre positivo, nunca negativo". En esta entrada:

  • Haremos un resumen de las actividades que hemos hecho en esta tarea
  • Incluiremos la infografía sobre estrategias para reducir la competitividad
  • Presentaremos nuestro decálogo de buenas conductas
Recursos

Podemos consultar este documento para conocer más sobre los códigos de conductas deportivas para jugadores. 

Evaluación

La evaluación se producirá a través de la rúbrica referente al decálogo de buenas conductas en deporte  (descarga formato editable formato pdf).

Diario de aprendizaje

Redactamos una nueva entrada en nuestro diario de aprendizaje denominada "Siempre positivo, nunca negativo".