La innovación en la empresa

¿Por qué es importante la innovación?

La innovación permite tanto a las personas como a las empresas interactuar en un mundo que cada día es más complicado y cambiante. En las pequeñas y medianas empresas la innovación facilita por un lado producir bienes y servicios que son percibidos por el cliente como más valiosos (por lo tanto estará dispuesto a pagar más y serán clientes más fieles) y por otro permite utilizar tecnologías que nos permitan producir más con menos recursos (por lo que los beneficios se incrementan).

A nivel del conjunto de la sociedad la innovación está relacionada con el concepto de competitividad, que supone que un país será competitivo cuando, además de que sus empresas ganen mercados exteriores, consiga enriquecerse y por lo tanto incrementar la renta de sus ciudadanos.

En resumen, innovar permite a las empresas ofrecer productos y servicios con valor para los clientes, vender más, ser más competitivas tanto en mercados nacionales como internacionales y generar una mayor riqueza a nivel de país.  Como futuros emprendedores y emprendedoras de nuestros propios negocios la innovación no es una opción sino una obligación.                                 

Pixabay. Innovación (CC BY-SA)

Definición de Innovación

Según el Manual de Oslo, "Innovar es utilizar el conocimiento y generarlo si es necesario, para crear productos, servicios o procesos que son nuevos para la empresa, o mejorar los ya existentes, consiguiendo con ello tener éxito en el mercado"

Esta definición contiene aspectos muy importantes:

• La innovación en muchos casos surge de nuevos conocimientos, de ahí que sea fundamental la inversión en investigación y desarrollo para conseguirlo. Los Parques Tecnológicos, Centros de Investigación y las Universidades realizan investigación básica que dará lugar a innovaciones que se traducirán en nuevos productos o servicios

• Los productos, servicios o procesos tienen que ser nuevos para la empresa en cuestión y no necesariamente para el mundo. Por ejemplo, un emprendedor puede desarrollar en su país como innovación una idea que ya está funcionando en otros países. 

• Si la innovación no se traduce en beneficios no es innovación. Es decir, innovar por innovar, si no se traduce en un incremento de ventas, si no hay un cliente que esté dispuesto a pagar por ese producto o servicio, no sirve de nada.